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martes, febrero 22, 2005

Viaje a los sueños polares

Me voy del frío (véase la foto, de hoy) al frío, en un viaje que, por varias razones, me hace mucha ilusión.

Ya saben, a partir de mañana estaré por Madrid. En principio no pienso actualizar durante este tiempo, que para algo estoy de vacaciones, aunque nada se descarta.

A los menos, hasta pronto, a los más, hasta la semana que viene.

Por cierto, Chesca, he recibido tu mensaje. Te llamo.

Eurobesos.

"We're coming in from the cold,
And everyone's searching for someone to hold.
Take a look around you,
There's no-one there.
How can you call this fair?"

"Coming In From The Cold" (THE DELGADOS).

lunes, febrero 21, 2005

Es que sí



Sí, ahora es que sí, la constitución europea es que sí. Yo no he votado (algún día tendré que ir al consulado a solucionar mis problemas con el censo), pero si lo hubiera hecho probablemente también hubiera sido afirmativamente, aunque solo fuera por inercia. Sobre las críticas a lo prematuro del referéndum, yo prefiero verlo como que ser pioneros en algo no tiene porque ser necesariamente malo, en todo caso al contrario.

Lo del misterio de la torre Windsor me parece una historia fascinante. Que hagan la peli ya. Lo peor es que me huele a caso que no se llegará a resolver o del que no se sabrá toda la verdad nunca. Qué pena, porque es de esas historias de las que realmente me gustaría saber todo lo que sucedió con pelos y señales. Espero tener ocasión de hacerme una foto junto al edificio cuando esté en Madrid, en plan souvenir morboso.

Y la extraña pareja Beckham ha tenido otro niño, con nombre polémico incluido. Pues que conste que a mí me gustan mucho los tres nombres: Brooklyn, Romeo y Cruz. Aunque cualquiera de los tres sería bastante improbable para un hipotético hijo mío, las combinaciones Brooklyn Beckham, Romeo Beckham o Cruz Beckham me parecen muy eufónicas (el apellido también ayuda, con el mío, por ejemplo, no funcionan en absoluto). Por cierto, que todo el mundo dice que es nombre de chica, pero a mí en seguida me ha venido a la cabeza un precedente: Cruz Castillo, el de "Santa Bárbara" (ver foto).

Hace un rato ha estado nevando bastante, y seguramente lo haga más abundantemente en los próximos días. Miedo me da, porque normalmente lo que provoca aquí es un absoluto caos en el transporte, y yo tengo un avión que coger el miércoles por la mañana.

domingo, febrero 20, 2005

Los fantasmas del Windsor



"Pronto hará un año que me puse un año de plazo para trazar un plan sobre cómo iba a cambiar la manera en que funcionan mis cosas, y el año acaba ahora, y todavía no etoy listo para tomar decisiones importantes por mí mismo. Y casi que voy a esperar un año a ver si todo empieza a mejorar".

"Tres años harto", Astrud.

sábado, febrero 19, 2005

No tengo miedo (al futuro)

Hoy hace tres años que Luis y yo aterrizábamos en el aeropuerto de Gatwick (que, curiosamente, nunca más hemos vuelto a utilizar), y empezábamos una aventura que, en teoría, consistía en pasarse aquí seis meses aprendiendo/practicando inglés para luego volvernos a España, más sabios y políglotos. Más listo no sé si soy, inglés sé un pelín más (no tanto como me había imaginado y hubiera deseado), pero lo cierto es que lo de regresar se fue aplazando y aquí seguimos todavía.

Para mí desde luego supuso un cambio radical en mi vida. Me vine para aquí sin experiencia laboral oficial y afrontando el reto de vivir por primera vez fuera de casa de mis padres, todo ello en una ciudad que me era completamente ajena, en la que sólo había estado en total cuatro o cinco días (en 1998) y cuyo número de habitantes multiplica apróximadamente por mil trescientos el de mi pueblo. Eso sí, siempre he tenido un feeling muy especial con Londres y siempre creí que era MI ciudad, lo que el tiempo no ha hecho más que confirmar.

Ha habido muchos momentos buenos y también muchos malos, sobre todo en las épocas en la que alguno de los dos no tenía o no encontraba trabajo. O los últimos meses en nuestra anterior casa, donde una de esas personas realmente malas y miserables con las que uno se topa de vez en cuando en la vida nos hizo la vida imposible y casi nos hizo tirar la toalla. A mí me ha rondado en varias ocasiones por la cabeza la idea de volverme, pero en aquella situación no me apetecía. A pesar de lo mal que lo pasé no quería irme derrotado, habiendo perdido una batalla, y, afortunadamente, no lo hice y todo mejoró (al repugnante tío aquel no le deseo nada bueno en su vida, jamás, creo que nunca he odiado a nadie tanto como a él).

Pero también he hecho muchas cosas que antes me parecían inalcanzables, y siempre he tenido la sensación de estar aprendiendo algo nuevo cada día, y de que todo esto me ha endurecido (positivamente) y formado como persona, y, lo que siempre digo, el efecto terapéutico que Londres ha tenido en mí es impagable. Consiguió liberar mi mente de todas aquellas preocupaciones absurdas que tenía antes de venirme para aquí, y que tan a menudo me hacían caer en la depresíón; me curó la tristeza, la frustración y aquella sensación de claustrofobia que tanto me anulaban.

Inevitablemente, pienso en el futuro, y no lo tengo del todo claro. Según el día, tanto me veo envejeciendo aquí como haciendo las maletas en un plazo relativamente corto. De quedarme aquí, lo que tendría que mejorar muy sensiblemente es el aspecto laboral, eso está claro. De mi trabajo actual lo único que me gusta es lo de las treinta horas semanales con el sueldo que tenía antes trabajando cuarenta, nada más.

Ahora que empiezo mi Gira 2005 por España (Madrid, Barcelona, Galicia), creo que es un buen momento para pensar lo que realmente voy a hacer, y comprobar si lo que veo por ahí me gusta más que lo que tengo ahora. A la vuelta del último de estos viajes (allá por abril), espero haber tomado ya una decisión al respecto. Qué nervios, ¿cuál será?

jueves, febrero 17, 2005

Soy una paja en el ojo

El martes, tomando café con una compañera de trabajo, tuvimos un pequeño diálogo parecido a éste:

Ella: Hay que ver lo consumista que es la sociedad en la que vivimos. Se inventan cosas como lo del día de los enamorados, que no tiene ninguna tradición, sólo para que la gente se gaste el dinero en cosas inútiles.
Yo: Ya, yo ayer fui al cine y estaba lleno de parejas. Y en la calle había decenas de vendedores de flores haciendo su agosto. La gente muchas veces necesita excusas como un día así para demostrar lo que sienten y nos han inculcado que lo podemos demostrar con una flor, una caja de bombones o un diamante.
Ella: Yo lo veo completamente absurdo, el amor hay que demostrarlo día a día, no el 14 de febrero porque sí.
Yo: ¿Tú has regalado algo?
Ella: ¿Yo? Bueno, sí, una tontería de nada a mi novio. Pero que conste que lo del día este me parece fatal.

Vale, a mí, a ella y a todo el mundo. Yo no conozco a nadie que diga: "Qué bien, qué maravillosa oportunidad nos conceden al tener un día como San Valentín en el que podemos expresar nuestro amor a nuestra pareja a través de un regalo". Pues como la Navidad, el día del padre, de la madre o del primo segundo (todo llegará). Todos protestamos, pero casi todos picamos. Así que qué menos que reconocer que los engañados somos todos, no sólo los demás.

Esta semana va de fechas señaladas: mañana es el cumpleaños de Luis (que no va a celebrar porque ya son veintimuchos y no le apetece, el típico síndrome de Peter Pan que yo también padezco, pero menos), y pasado mañana hará tres años que nos instalamos en Londres. Así que me imagino que alguna de las próximas entradas de este diario serán de esas de reflexión sobre el paso del tiempo, qué voy a hacer de mi vida y bla bla bla. Agárrense fuerte...

martes, febrero 15, 2005

Días de cine

Me parece que ya he comentado alguna vez que tanto Luis como yo tenemos un abono de cine que nos permite ir a ver todas las películas que queramos por una relativamente barata cuota mensual. Además de esto, que ya de por sí me parece estupendo, y que a veces lamento no aprovechar más, los señores de los cines UGC nos ha ofrecido la posibilidad de asistir al preestreno de una película sorpresa para un número reducido de personas (menos de las que esperaban, éramos ocho en total). Al final tienes que rellenar un cuestionario diciendo lo que te ha parecido, si la recomendarías y cosas por el estilo, supongo que para medir de alguna forma la futura reacción del público y las posibilidades de la peli en taquilla.

Nos ha tocado ver "The Edukators", una película de un director austríaco llamado Hans Weintgartner, del que no había oído hablar en mi vida, que se proyectó en el último Festival de Cannes. Uno de los protagonistas es Daniel Brühl, un actor hispano-alemán (nacido en Barcelona), que hacía el papel principal en "Good Bye Lenin!", una obra alabadísima por la crítica que aún no he tenido ocasión de ver. No creo que "The Edukators" vaya a ser un éxito de público ni a tener una distribución más o menos decente, pero qué gusto salir del cine con la sensación de haber visto algo realmente especial y, lo más importante, que estimula el pensamiento y da pie al debate. También me hizo reflexionar sobre una idea que me ronda muchas veces por la cabeza: todas las cosas (música, cine, literatura...) que existen y potencialmente me gustarían, y que no conozco o, en muchos casos, nunca conoceré. ¿Quién me dice a mí que mi película o canción favorita no es una que nunca he tenido ocasión de ver o escuchar?

No quiero extenderme mucho hablando de la película, porque hacer una tesis acerca de algo que la mayoría no conoce es un poco absurdo, pero diré que la historia habla sobre tres jóvenes y sus ideales, y gira en torno a tres temas principales: el amor, la amistad y la confianza. Me recordó vagamente a "Y tu mamá también", pero la supera ampliamente, y tiene mucho más contenido político, ya que durante la trama se debate continuamente sobre el capitalismo y su protagonismo en la sociedad actual. El único pero para mí (para Luis no, hubo muchísimas cosas en las que no estuvimos de acuerdo), es que, si bien durante todo el metraje se aportan argumentos a favor y en contra de una y otra postura (luchar para intentar cambiar el mundo o conformarse y sacar partido de lo que hay, teniendo en cuenta lo breve de nuestra existencia), el final se decanta demasiado obviamente por una.

Paro ya, que me había propuesto no hablar tanto de cine en este blog, y aquí sigo, erre que erre, que ya me está entrando complejo de Antonio Gasset. Lástima que no se me ocurra ninguna de sus frases memorables para cerrar...

lunes, febrero 14, 2005

Marejada a fuerte marejada

Por fin, después de haber visto, leído y oído tantas cosas, de escuchar tantos argumentos a favor y tantos en contra, he ido a ver "Mar adentro", que se estrenó este fin de semana en Inglaterra. Y lo mejor de todo es que la clave, la opinión con la que más coincido, no se me reveló hasta ayer, cuando Luis llegó del cine de verla y me dijo algo así: "Es que no sé, es muy difícil dar una opinión objetiva, es todo muy cercano, a mí muchas cosas me recuerdan a la casa de mis abuelos".

Bingo. Mientras estaba viendo la película e incluso al salir del cine, me resultaba muy difícil analizar objetivamente si me estaba gustando lo que estaba viendo, si me estaba enganchando la historia, si los actores estaban tan estupendos como (casi) todo el mundo dice, si la emoción o las lágrimas eran verdaderas, porque lo cercano de muchas de las situaciones me hicieron sumergirme en recuerdos del pasado o en percepciones que conozco como la palma de mi mano (ese humor...).

Por lo que a mí respecta, un diez a la ambientación. Igual que yo no entiendo de la misma manera una película china que un chino, yo no creo que esta película la entienda igual un gallego que alguien que no lo es. Ojo, que no digo que alguien de fuera (sea de España, Europa o el mundo) no la pueda disfrutar también, pero que hay muchos matices, guiños o bromas que no se van a captar de la misma manera, eso seguro. Puede que sea porque los gallegos no estamos acostumbrados a esto, porque pocas veces la realidad de Galicia aparece reflejada en un medio como el cine, y lo más sorprendente es que el retrato más fiel que yo he visto lo haya conseguido un chileno de nacimiento y madrileño de adopción.

Intentando abstraerme un poco de todo esto, la historia en sí me pareció correcta, aunque nada del otro mundo. Emociona porque es un asunto delicado, pero a mí muchas veces me dio la impresión de estar echando la lágrima en el momento equivocado (excepto cuando Javi corre tras la furgoneta, que es probablemente el que más conscientemente la busca). Ni siquiera sentí una especial simpatía por Ramón Sampedro como personaje, no encuentro un lazo emocional que me una íntimamente a él.

Desde luego, esta no va a ser mi película favorita de Amenábar. Habiéndome gustado (y mucho, por lo mencionado anteriormente), noto que es la menos personal de sus obras, en la que menos se nota su sello. "Tesis", "Abre los ojos" y "Los otros" sólo las podía haber dirigido él, pero esta cuesta menos imaginarla dirigida por otro realizador español, ¿no? No digo que esté mal hecha ni mucho menos, pero sí que es más convencional, una palabra que esta ahora no formaba parte de su particular diccionario.

Los actores me parecen bien en general y excepcional en dos casos: Mabel Rivera (Manuela), conocida en Galicia principalmente por su papel en la muy floja telecomedia "Pratos combinados", que me pone los pelos de punta interpretando a esa mujer descendiente directa de la figura de la típica madre del matriarcado gallego, enlace entre el pasado y el futuro de nuestra sociedad, y, como no, Lola Dueñas (Rosa), inconmensurable, en uno de los trabajos de creación de un personaje más impresionantes que yo he visto jamás. También por eso, porque yo conozco y he conocido a muchas Manuelas y a muchas Rosas, y son así.

Javier Bardem también está bien y, aunque al principio me puso un poco nervioso su forma de hablar (no el acento, al que pronto me acostumbré), me imagino que habrá hecho un trabajo de mimetismo y que probablemente Ramón Sampedro tuviera ese deje y ese arrastre en las palabras, no lo tengo presente ahora. Aún así, no es uno de mis actores favoritos ni creo que esta sea una actuación tan por encima de lo que ha hecho anteriormente. Belén Rueda demuestra que es una buena actriz y que probablemente sea capaz de quitarse el sambenito del "Vip Noche" algún día, pero no creo que ni ella ni Tamar Novas sean merecedores de un Goya (o lo fueran si los Goya significaran algo).

Pues sí, me ha sorprendido mucho sentirme tan "tocado" por este retrato del universo gallego. Debe de ser que, aunque me creo tan urbanita e internacional, no soy más que el emigrante de toda la vida venido a más. Que aunque me vine a este país por distintos motivos a los de mis padres (que lo hicieron en 1966), soy el siguiente eslabón de esa cadena, y la morriña, definitivamente, debe de ser algo genético.

viernes, febrero 11, 2005

Atónito

Al principio, tenía una especie de sección en el blog en la que ponía la música que escuchaba en ese día o momento. Dejé de hacerlo por dos razones: la primera es que a veces me veía obligado a escuchar algo simplemente para comentarlo esa noche, y eso no está bien, porque uno debe escuchar música (o hacer cualquier cosa) porque le apetece y no por obligación; la segunda era porque coincidió la época con el lanzamiento del "Performance" de Astrud, y ya ves tú qué gracia estar repitiendo todos los días que estaba escuchando lo mismo.

Pero no se me debe olvidar que la música es uno de los motores que mueve mi mundo, y no quiero perder la costumbre de hablar de vez en cuando de lo que suena en mi iPod (otro de los inventos del siglo), mi compañero de viajes todas las mañanas que voy a trabajar. Y advierto que cada vez me estoy haciendo mas popi y más ochentero, con lo mal vistos que suelen estar los popis (los ochenteros no tanto), yo, que siempre tuve fama entre mis amigos de ser tan alternativo y de escuchar esos grupos raros que no escuchaba nadie más (de mi entorno). Y ahora se me puede ver descargando con cierta verguënza y sin que nadie se entere (ejem) canciones de Olé Olé, Mecano o Duncan Dhu (y me callo los nombres más sonrojantes). Que conste que no sólo escucho pop, eh, que en cuestiones musicales, el eclecticismo sigue siendo mi máxima.

Bueno, al grano. Como había prometido, me gustaría hablar de Miranda!, el grupo argentino que he descubierto gracias a Telecine. Tienen dos álbumes, que yo sepa: "Es mentira" y "Sin restricciones", este último publicado en 2004 y el que más estoy escuchando. Si hubiera que etiquetarlos, podríamos decir que hacen pop electrónico, pero su peculiar acercamiento al género hace que la definición se quede irremediablemente corta. Los referentes que vienen a mi cabeza son Astrud, aunque quizá sólo por su originalidad, los Sparks, por los coqueteos operísticos de los dos cantantes (un chico y una chica), y Pimpinela, por ese toma y daca de unas letras que hablan primordialmente, y casi exclusivamente, de amor y mucho desamor. Adoro los sonidos de juguete que sacan de los teclados (el principio de "Atención" es tremebundo) y como condensan los fraseos en pequeñísimos espacios (que en algunos estribillos dicen cuatro palabras por segundo, vamos). Prefiero sus temas más rápidos y bailables a esas baladas que a veces están demasiado peligrosamente cerca de ese "estilo OTI" que me tira un poquito más para atrás, aunque hasta ahí tienen su cierto encanto. Mis canciones favoritas del momento son "Don" (con esa gloriosa frase "es un sooolo, es la guitarra de Lolo", la ya mencionada "Traición" (que incluso consigue introducir sin chirriar un toque latino a lo Miami Sound Machine") y "Yo te diré", cuyo divertidísimo vídeo a lo "West Side Story" puede descargarse aquí. Miranda!, un placer.

Otra agradable sorpresa pop que descubrí ayer es niTo niKo, el proyecto de un jovencísimo (o eso parece en las fotos) chico de Valencia. Su canción "Esa sensación" ha sido seleccionada para el concurso de grupo revelación nacional que organiza el festival Contempopranea, aunque a mí me gusta todavía más "Atónito", una amarga historia de cuernos cuya letra emociona por su sencillez y cercanía ("Lo que me deja atónito no es que se durmiera tu corazón, lo que me deja atónito es que no te importó romper el mío en dos. Lo que me deja atónito no es que te acostaras con alguien peor, lo que me deja atónito es que en tu cuarto aún estaban mis fotos", canta con su bonita voz). En su página web (nitoniko.tk) se pueden descargar cinco de sus canciones, entre ellas, la propia "Esa sensación" y sendas versiones de "Do You Remember The First Time?" de Pulp y "There Is A Light That Never Goes Out" de los Smiths. Ojalá tenga mucha suerte, a mí ya me ha conquistado.

Otro par de canciones que me tienen enganchado son "Krafty", lo nuevo de New Order y "Honest Mistake" de The Bravery. De los primeros, por legendarios y veteranos, poco hay que decir, sólo que han sacado un tema que no deja de ser más de lo mismo, pero yo creo que han vuelto a acertar, porque se acaba pegando como un chicle a un zapato. Y es que a mí me parece que cada vez van a más, y sus recientes "Crystal" y "Here To Stay" los considero dos de sus mejores singles de todos los tiempos. Los segundos se parecen mucho (¿demasiado?) a Franz Ferdinand y The Killers, pero el hecho de que sean más bailables que aquellos y lo pegadizo del estribillo pueden hacer de "Honest Mistake" una de las canciones más escuchadas de 2005.

Me queda en el tintero comentar lo nuevo de Daft Punk, pero todavía no lo he escuchado lo suficiente. A priori me ha parecido que sigue la línea del "Discovery" pero más macarra aún (algo para mí no necesariamente malo). En fin, ya veremos.

Y por cierto, mi fan número uno se va de vacaciones una semanita, así que espero que se lo pase muy bien y que a la vuelta me (nos) siga deleitando con sus siempre atinados comentarios... :P ¡Buen viaje y un beso!

jueves, febrero 10, 2005

La copa de Europa

Anoche se entregaron los Brit Awards, o Brits (que se sepa, la antesala de nada, aunque obligado es decir lo de "los Grammy británicos"). Los estuve viendo hace un rato en la tele en un día que aquí ha estado marcado por el anuncio de la boda de Carlos y Camilla (qué pareja tan linda). Pues al final no sé cuál de las dos cosas habrá sido más interesante, porque lo de los premios estos me ha dejado un poco indiferente, o quizá decepcionado.

Es que el mismo concepto de estos galardones es un poco sui generis, porque sólo unos pocos son votados por los miembros de la industria musical. Muchos de ellos los vota el público, y un público muy concreto. Por ejemplo, los televidentes del programa MTV Base, los de Kerrang! TV o los oyentes de BBC Radio 1. O, lo más surrealista, la categoría de mejor "Pop Act" la vota un ecléctico grupo de personas que consiste en: los espectadores de CD:UK (una especie de "Musicauno"), los lectores de la columna "Sun Bizarre" del periódico "The Sun" y los clientes de telefonía móvil de Samsung y O2. Muy raro, ¿no? Lo que provoca esto es mucha variedad en los premiados, pero muy poca credibilidad y coherencia (como que Franz Ferdinand ganen lo de mejor grupo británico por delante de Keane, pero pierdan lo de mejor grupo británico revelación ante éstos).

Como este año era el 25 aniversario del evento, se ha elegido también la mejor canción británica del último cuarto de siglo. Pues si nos atenemos a la votación del pueblo soberano, esa canción no es otra que "Angels" de Robbie Williams, que quedó por delante de una selección tan variada como la siguiente: "Love Will Tear Us Apart" de Joy Division, "Wuthering Heights" de Kate Bush, "We Are The Champions" de Queen y "Leave Right Now" de Will Young.

Ya sé que esto de los premios es una cosa muy subjetiva y que nunca va a llover a gusto de todos, pero yo creo que si realmente quieren que alguien se tome en serio los Brits, deberían aprovechar la fecha señalada de los veinticinco años para hacer una remodelación e intentar darles un poco de prestigio, al fin y al cabo, la música británica todavía tiene bastante más que decir que la de otros países. Supongo que eso pasa también porque vuelva a suceder algo excitante o rompedor, que lo último fue el "brit-pop", de donde salieron un montón de grupos, muchos de ellos paja, pero otros tantos magníficos.

Mientras, en España, podemos jactarnos de tener los premios musicales con el mejor nombre posible: los Amigo, en los que, efectivamente, los amigos se votan los unos a los otros.

miércoles, febrero 09, 2005

Esto es hardcore

Yo no sé si en España estarán poniendo esta obra maestra en forma de anuncio de televisión, que sirve como lanzamiento del nuevo Golf GTi de Volkswagen. Si no es así, es absolutamente obligatorio pinchar el link que va a continuación. Yo me quedé completamente boquiabierto la primera vez que lo vi, y todavía me dura. Para algunos que me conozco que aprobaron muy raspado el cursillo de ofimática y que no saben para qué sirven la cuarta parte de las teclas del ordenador, advierto que está en formato Quicktime, así que el que no lo tenga, a la página de Apple a bajárselo.

Sobre esto sí que exijo comentarios.

http://image.guardian.co.uk/sys-video/Media/video/2005/01/27/golfgti.mov

Y ya que estamos de links, otra rayada que he descubierto gracias al magnífico blog de iko. Son versiones de famosísimas canciones tocadas con... acordeón, nada menos. Para que nos vamos a engañar, el tío no es precisamente un virtuoso del instrumento que popularizó María Jesús, y la mayoría de las adaptaciones no son aptas para melómanos u oídos demasiado sensibles, pero yo me reído un rato largo.

Cambiando completamente de tercio, treinta años después del injusto encarcelamiento de once personas por aquellas bombas que el IRA puso en pubs ingleses, el gobierno, y más en concreto Tony Blair, ha perdido perdón públicamente a las víctimas de uno de los más escandalosos errores judiciales de la historia del Reino Unido. Lo más chocante del caso es que, a pesar de que los conocidos como "los cuatro de Guildford" y "los siete Maguire" fueron liberados y absueltos de todos los cargos en 1989 y 1991, respectivamente, nunca hasta ahora el gobierno les había ofrecido una disculpa pública como la de hoy.

Esta historia se hizo mundialmente famosa gracias a la película "En el nombre del padre", dirigida por Jim Sheridan, que me impresionó sobremanera la primera vez que vi. Pero todavía más me gustó el libro, que leí a posteriori, escrito por el propio Gerry Conlon, el protagonista de la historia al que encarnaba Daniel Day-Lewis en la gran pantalla. Además lo leí en un momento muy especial de mi vida, en 1998, durante los tres meses que estuve viviendo en Staines, un pueblo cercano a Londres. Aparte de la historia, me cautivó la descripción del ambiente social y político de la Inglaterra del momento, y creo que me ayudó a amar, todavía más, la cultura y la idiosincrasia de este país que tanto me gusta y al que estoy unido por nacimiento.

Como siempre defiendo los poderes catárticos de este rincón personal, me veo obligado a hablar de mi estado de ánimo. Hace no mucho tiempo me sentía bastante desorientado y, sobre todo, triste, yo que tanto odio la tristeza, la mía y la ajena, que muchas veces llega a afectarme incluso más que la propia. Pues nada, aviso para navegantes, hoy siento que el bache ha pasado y que vuelvo a ser yo, y como estoy tan contento, quiero compartirlo. Y quiero también reivindicar este medio, internet, porque aunque en casa muchas veces me dicen que paso demasiado tiempo enganchado a una máquina, para mí la máquina sólo es el medio que me permite llegar a algo mucho más profundo, a personas de carne y hueso.

Yo fui muy asiduo a un canal de chat del IRC durante más de un año y medio (¿o fueron dos?), y lejos de considerarlo una experiencia negativa, he de decir que me sirvió para conocer a gente muy especial y muy afín a mí a la que sé que nunca hubiera conocido si aquello no hubiera existido, y menos viviendo donde vivía. Hice amigos de verdad que todavía conservo y, aunque esto fuera de rebote, tampoco hubiera conocido nunca a Ana, mi ángel de la guarda en forma de compi de piso, y una de las personas que sé que, pase lo que pase, sea lo que sea lo que nos depare el futuro, siempre formará parte de mi vida.

Y ahora, de algún modo, tengo una sensación parecida. Aparte de servirme para que mis amigos de toda la vida sepan de mí, para que ese lazo no lo extinga la distancia, algo tan importante para mí, que siempre he intentado mantener los contactos y expresar mis sentimientos hacia los demás (durante varios años, en navidades, escribía más de treinta postales, todas ellas personales), también estoy conociendo o re-conociendo a gente a la que ya quiero y a la que tampoco olvidaré fácilmente.

Porque, al margen de paranoias personales, pajas mentales o anécdotas absurdas, esto puede ser el principio de una gran amistad...

(Telón).

martes, febrero 08, 2005

Entre el cielo y el suelo

Caray, que llevaba ya tres días sin actualizar y esto no puede ser. Por varias circunstancias no he encontrado nunca el momento adecuado para hacerlo, pero aquí va un resumen de lo que he hecho durante este tiempo.

Aunque no lo comenté en su día, el viernes fui testigo de una de esas escenas "de película" que uno presencia de vez en cuando en esta ciudad. Resulta que un tío se encaramó a lo alto de unos andamios que estaban colocados en el edificio de H&M en Oxford Circus, y amenazaba con saltar al vacío. Pues eso, como en las películas, todo acordonado, caos circulatorio, mucha policía (uno arriba intentando convencer al suicida potencial) y bomberos, y cientos de curiosos esperando el desenlace. Cuando me iba a volver a casa, el tío todavía seguía allí, casi dos horas después de la primera vez que lo vi. Por lo que he leído después, finalmente no se tiró. A los que les debió de hacer una gracia tremenda fue a los de H&M, que tuvieron que tener la tienda cerrada durante bastantes horas.

El sábado por la noche salimos a tomar unas cervezas y luego Ana y yo seguimos la fiesta en casa hasta altas horas de la madrugada. Como siempre la música fue protagonista, y quiero mencionar a un grupo que he descubierto gracias a Telecine (gracias), que se llaman Miranda! y son argentinos. Hacen un pop electrónico muy original y, aunque tampoco he tenido tiempo a escuchar todas las canciones que me he bajado, tienen todas muy buena pinta.

Por cierto, que el sábado en el pub salió la eterna discusión sobre doblaje sí-doblaje no. La cosa empezó porque alguien dijo que cuando aquí subtitulaban las películas españolas lo hacían mal, que la traducción era deficiente. Primero, no estoy de acuerdo con esta afirmación (el mundo de la traducción es realmente difícil, porque aparte de cambiar el idioma hay que intentar adaptarlo a la idiosincrasia del país en cuestión, y eso, la mayoría de las veces, es muy complicado), y segundo, suponiendo que las traducciones fueran malas, eso querría decir que no sólo lo serían en los subtitulados, sino también, y más especialmente, en los doblajes, pero ahí tragaríamos por aquello de "ojos que no ven...", ¿no?

Le he ampliado la memoria RAM a mi ordenador a 640 MB, y la verdad es que se nota bastante, sobre todo cuando tienes varias aplicaciones abiertas al mismo tiempo. Como lo hice yo mismo, surgieron algunos problemillas: al abrir el ordenador, me di cuenta de que necesitaba obligatoriamente un destornillador. Total, que como no tengo, me fui a comprar un kit de destornilladores al Argos. Primero pensé que no me iban a servir, que eran todos muy grandes, y ya me estaba dando un sofoco, pero luego, con ayuda de Luis, conseguimos completar la tarea. Ahora sí, el kit es tan completo que aparte de los destornilladores trae unas cincuenta brocas para taladro que me van a ser muy útiles, teniendo en cuenta que no tengo taladro.

Anoche fui al Heaven con Rebeca y Aníbal. Aunque la cosa empezó mal, por lo que podríamos llamar el "incidente paracetamol", al final nos lo pasamos muy bien. La música, decente tirando a buena, según la sala, y chicos realmente impresionantes, de todas las razas, colores y edades. Cada vez que atravesaba una de las pistas me enamoraba treinta veces seguidas.

Por último, una delirante entrevista que vi esta mañana en la tele: un hombre (inglés) sufrió un derrame cerebral y cuando se recuperó todo volvió a la normalidad excepto por un pequeño detalle: ahora el tío habla inglés con acento italiano. La verdad es que no me podía creer lo que estaba viendo y oyendo, pero investigando un poco por la red, he descubierto que no es una coña, sino que eso realmente existe y se llama "síndrome del acento extranjero". Podéis leerlo pinchando aquí. Vivir para ver.

viernes, febrero 04, 2005

Es lo suyo

Qué día tan largo, pardiez. He trabajado de diez a once. ¿Sólo una hora? Más bien no. De diez de la mañana a once de la noche. Menos mal que ha sido para intentar solventar los errores cometidos por otros y no los míos propios. Como ya no sé ni qué poner, voy a dedicarme a contestar los comentarios que habéis dejado.

Lunatic (como no firmas, voy a llamarte así). Sí, eso es la mixomatosis, pero si quieres buscarle alguna relación al título de la entrada con el contenido, no lo hagas strictu senso. Yo tiraría más bien por la canción de Radiohead que lleva el mismo nombre...

Charo. Yo también conozco a mucha gente que no soporta a Cayetana. Gracias por recordarme lo de la voz, porque se me olvidó comentar que otra cosa que me fascina de Sardá es su voz. La más bonita voz de hombre que yo he escuchado. También, a otro nivel, me gusta la de Tricky (más cuando habla que cuando canta, esa afonía crónica tiene algo muy especial e inquietante). En tiempos me gustaba mucho la de Ramón Langa, el "doblador oficial" de Bruce Willis, pero perdió su encanto por dos razones: una, que ya comenté en su día: los anuncios de Citroën (no sé si eran peor esos o los de Summers y Salas), y su relación (¿fue matrimonio?) con Marta Robles, una tía a la que detesto. El equivalente femenino de Tricky sería la propia Najwa, con esa voz afónica-susurrante ("Tu-vi-da-tu-vi-da"). También la prefiero hablando/susurrando que cantando

Álvaro. A mí me cae bien mucha más gente, sólo quería romper una lanza (qué expresión tan absurda y manida) por estos en concreto porque la mayoría de la gente los odia. A mí los alcohólicos y drogadictos que desarrollan su actividad laboral como si tal cosa no me caen bien, me dan envidia, yo no puedo, y las divas de supermercado sólo me hacen gracia. No estás en la edad el pavo, eres un poco pava :P.

Ana Hache. Cayetana cae mal, y si no véase el comentario de Charo. Yo no he hablado de los mejores conciertos de mi vida, pero ya de paso: Radiohead en Bilbao (vaya fin de semana, se me caen las lágrimas de la emoción sólo de pensarlo) y Astrud en Benicássim (con la frase lapidaria de Genís: "gracias por elegirnos a nosotros y no a Onassis": su concierto coincidía con el de Oasis).

¿Y Sardá? Después de todo el rollo que he soltado, ¿nadie va a decir nada de Sardá?

jueves, febrero 03, 2005

Mixomatosis (Parte 2)

Artistas que no he visto nunca en concierto y me gustaría

- Björk. Soy un gran admirador de esta artista con mayúsculas. Me parece un mundo aparte, siempre a su bola, al margen de las tendencias, siempre marcándolas más que siguiéndolas. El último disco, "Médulla", no me ha enganchado tanto como otros, pero hacer un álbum (casi) únicamente a base de voces es de un arriesgado que se agradece. Me muero de ganas por oír su inimitable e única voz en directo.

- Pet Shop Boys. A estos los vi en Trafalgar Square, poniéndole banda sonora en directo a "El acorazado Potemkin", en un evento que, a pesar de la lluvia, fue inolvidable. Pero el no haber visto todavía un concierto "convencional" del que es, creo, mi cuarto grupo favorito de todos los tiempos, es imperdonable. La oportunidad de este año de Benicássim era inmejorable, pero al final no pude ir.

- Morrissey. Si finalmente hubiera ido al FIB, habría sido de los que se hubiera llevado un chasco de los gordos con lo de la cancelación del concierto. Confío en que haya más oportunidades, porque lo admiro, como músico y como persona, a pesar de sus excentricidades.

- Depeche Mode. Aunque también los admiro mucho, me hubiera gustado verlos en su momento cumbre, que para mí fue 1990, cuando sacaron "Violator". El siguiente también me gustó, pero a partir de ahí, sólo canciones sueltas. Creo que hoy en día me aburriría un poco en un concierto suyo.

- Chico y Chica. Con lo divertidos que ya son en disco, en vivo tienen que ser risas dos mil. ¡Todo llegará, lo conseguiré!

Afortunadamente, al resto de mis artistas favoritos (Astrud, Fangoria, Radiohead, Mecano, Ellos, Madonna, Primal Scream, Suede, Pulp...), sí he tenido ocasión de verlos.

Famosos que en general caen mal y a mí me caen bien


Hay una serie de personajes famosos que, muchas veces no sé por qué, caen mal por defecto a casi todo el mundo. Pues a mí no, y explico por qué.

- Cayetana Guillén-Cuervo. Lo de su supuesta relación con nuestro ex-presidente fue muy fuerte, pero yo no me lo trago. A mí me parece una buena actriz y periodista (su programa de la Cadena SER estaba muy bien), y tengo la sensación de que sería una persona con la que me llevaría muy bien si la conociera. ¿Por qué se la odia tanto?

- Penélope Cruz. Lo de esta chica debe de ser por aquello de haberse ido a hacer las Américas, que no suele estar bien visto. A mí me encantaba como actriz (en "Todo es mentira" estaba fabulosa), aunque en esta faceta ya no es de mis favoritas. En las entrevistas y declaraciones suya que he visto/oído/leído siempre me ha parecido, en general, muy sensata y cabal.

- Najwa Nimri. De esta se critica su actitud, su supuesto carácter agrio y sus aptitudes para la música y la interpretación. Lo del carácter, pues no sé que decir, pero a mí como actriz me gusta mucho (sobre todo en "Los amantes del círculo polar" y "Lucía y el sexo") y, aunque no es Björk, en su irregular carrera musical ha intentado hacer algo diferente a lo que estamos acostumbrados.

- Lucía Etxebarría. Lo de Lucía supongo que es porque siempre dice lo que piensa, y eso no suele encajarse bien. A mí me gusta cómo escribe (aunque sólo he leído artículos suyos y "Beatriz y los cuerpos celestes"), lo que dice y cómo lo dice (creo que se expresa siempre muy bien).

- Fernando Fernán-Gómez. Pues a mí este señor me parece un genio. Siempre me ha gustado la idea del artista renacentista, brillante y polifacético, y creo que Fernán-Gómez es lo más cercano que tenemos en la actualidad. Casi todo lo que hace lo hace bien, o muy bien. Se le tacha de maleducado por lo del incidente de "váyase a la mierda", pero a mí mandar a alguien a semejante sitio tratándolo al mismo tiempo de usted me parece de una educación malvada y deliciosa.

- Javier Sardá. Este merece un capítulo aparte.

Javier Sardá


Siempre he admirado a este periodista ahora tan denostado. Lo descubrí por primera vez cuando era niño, en un programa en Radio Nacional de España que se llamaba "La bisagra", que solía escuchar con mi padre en el coche en unos viajes regulares que solíamos hacer a Santiago un par de veces por semana. Ahí ya se hacía acompañar por su alter ego, el señor Casamajor, el personaje creado por él mismo que solía poner el contrapunto con sus opiniones supuestamente basadas en la experiencia. Hoy en día me parece fascinante que pudiera presentar un programa de radio al mismo tiempo que interpretaba a este personaje sin que (casi) nadie sospechara nada.

Seguí escuchándolo cuando se cambió a la Cadena SER y abrió "La ventana", uno de los programas radiofónicos mas originales de la historia de la radio española, que, manteniendo el esquema clásico de la franja horaria (actualidad y entrevistas), utilizaba la imaginación como pilar básico de sus contenidos.

Hay mucha gente que no lo sabe o no lo recuerda, pero Tele 5 contrató a Sardá para que llevara a televisión el formato de "La ventana". Así lo hizo, en una versión corregida, aumentada y conceptual con "Crónicas marcianas". La primera temporada de este programa poco tenía que ver con lo que es en la actualidad. Hasta intentó mantener, con poco éxito, el anonimato del señor Casamajor. Y si el programa era diferente, también lo era la audiencia, porque al principio no funcionó, y no fue hasta que Antena 3 eliminó de la programación "La sonrisa del pelícano" de Pepe Navarro que Sardá se hizo definitivamente con el liderazgo de esa franja horaria que ha dominado sin, hasta hace poco, amenazas de ningún tipo.

Yo creo que a la mayoría de la gente lo que le indigna es que un programa de estas características, tan basura (que lo es), lo presente un periodista que le pega tan poco. Casi todo el mundo coincide en que Sardá es un tío culto y muy inteligente, que quizá este "desperdiciando" su talento haciendo este tipo de bazofia. Pero yo creo que es a lo que le han llevado las circunstancias. No nos engañemos, hoy en día, la tele "de calidad" no vende, no arrastra audiencias, ni publicidad, y muchos se han quedado en el camino. La gente prefiere la carnaza, el truculento cotilleo del famosillo del momento, y hasta que no reeduquemos nuestros hábitos de ver televisión, yo no puedo culpar a Sardá de hacer lo que hace.

Él no tiene ningún compromiso de servicio público. Ha sido contratado por una cadena privada para alcanzar unos determinados índices de audiencia y lo lleva cumpliendo con creces una temporada tras otra. Hace un programa cuatro veces por semana que le debe de llevar media hora preparar, y encima se está forrando. ¿Debemos condenarlo por ello? No seré yo, que ya me gustaría a mí llegar a una situación tan idónea: cobrar mucho, trabajar poco, pasármelo bien y dedicar mi (mucho) tiempo libre a hacer lo que dé la gana. Cuánto se debe de reír él de las críticas que lee.

Pues nada, así lo veo yo, y el que no esté de acuerdo, aquí mismo puede expresar sus opiniones, que, aunque contrarias, serán excelentemente recibidas.

"Javier Sardá, Javier Sardá, me mola, me mola, cada día más...".

miércoles, febrero 02, 2005

San Jorge y el dragón

El mejor programa de televisión que he visto en muchos años se llama "Dragons' Den" y lo emiten en BBC2. Los "concursantes" son jóvenes emprendedores que tienen una idea o un invento que quieren desarrollar o llevar a cabo. El problema, como no, el dinero. Tienen que presentar su propuesta a un grupo de cuatro hombres y una mujer de negocios multimillonarios (que son siempre los mismos) y tratar de convencerlos para que inviertan la suma de dinero que necesitan. Muy pocos lo consiguen, y normalmente, aparte de irse sin un penique, se llevan también implacables y crueles críticas, porque los cinco "dragones" no se cortan un pelo.

La verdad, hay de todo, desde artilugios verdaderamente ridículos hasta brillantes ideas que probablemente se hagan realidad dentro de no mucho. Cualquier cosa vale, siempre y cuando sea un negocio en potencia del que se puedan sacar grandes beneficios. El programa es realmente entretenido y emocionante, y lo único malo es que la primera entrega (espero que haya más) se termina la semana que viene. No creo que un formato de este tipo funcionara en España, o quizá sólo en el ámbito de esa nueva televisión pública que ha prometido el PSOE y que probablemente nunca tenga éxito, porque últimamente parece que la calidad no vende y, por tanto, eso sí es una mala inversión.

Más información, en www.bbc.co.uk/dragonsden.

Por fin voy a conocer Barcelona, ciudad en la que nunca he estado. Me he comprado los billetes hace un rato, con lo cual se completan todos los detalles de mi "temporada Willy Fogg": febrero en Madrid, marzo en Barcelona y abril en Galicia. Además, he hecho coincidir convenientemente mi visita con el concierto de Astrud en el Razz 2. Qué bien, qué ganas.

Mañana, más mixomatosis.

martes, febrero 01, 2005

Mixomatosis (Parte 1)

Los Goya

No sé, me ha sorprendido un poco lo criticados que han sido los Goya de este año, y que conste desde ya que hablo sin haberlos visto. Resultados aparte, he oído cosas como que la presentación en general fue penosa, que hubo errores al pinchar las cámaras, problemas de sonido, rótulos que no se veían, y varios fallos por el estilo. Pues, no sé, lo mismo de todos los años, ¿no? Si hay algo que se nos da mal en España es lo de las "galas" televisivas. Siempre hay algo que no funciona, un vídeo que no entra, un micrófono que falla, los guiones suelen ser sosísimos y es muy difícil encontrar a una persona que pueda llevar a buen puerto un evento de este tipo, porque creo que, simplemente, no existe. El Gran Wyoming y la Sardá son los únicos que se han acercado a conseguirlo, pero, ¿nadie recuerda ya el fiasco del año que los presentó Antonia Sanjuán? A priori, parecía una buena idea, al final, innumerables momentos de vergüenza ajena.

Sobre el monocorde resultado sigo sin poder comentar porque no he visto "Mar adentro", pero sobre la poca calidad en general de las películas o la presunta trascendencia de los Goya, corto y pego (con una ligera variación) algo que comenté en otro blog:

"'El viaje a ninguna parte', 'El bosque animado', 'Mujeres al borde de un ataque de nervios', 'El sueño del mono loco', '¡Ay, Carmela!', 'Amantes', 'Belle Epoque', 'Todos a la cárcel', 'Días contados', 'Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto', 'Tesis', 'La buena estrella', 'La niña de tus ojos', 'Todo sobre mi madre', 'El Bola', 'Los otros', 'Los lunes al sol', 'Te doy mis ojos'.

Estas son todas las que ganaron el Goya a la mejor película en sus respectivos años ¿Cuántas de ellas están entre vuestras favoritas de los últimos años del cine español? Mejor aún, ¿cuántas os gustan? A mí 7 de 18 (de ellas 4 de Almodóvar-Amenábar). Yo creo que les queremos dar una trascendencia a los Goya que no tienen, por eso lo de este año no me sorprende en absoluto, y si me sorprende la indignación que ha despertado.

Si hasta Andrés Pajares tiene un Goya al mejor actor…

Yo creo que el cine español en sí no existe. De vez en cuando sale alguna película que está bien o muy bien, normalmente siempre hecha por los mismos, pero de ahí a que exista una industria, o una corriente que podamos denominar “cine español” hay un gran trecho.

Se intentó un cambio: de la Iglesia, Bajo Ulloa, Medem, León de Aranoa, Urbizu…, pero hasta estos parecen haber ido cuesta abajo.

Más originalidad y menos acomodamiento."

Amenábar

Lo que más rabia me da es que la gente le empiece a coger manía a Amenábar por todo esto. Igual que hay mucha gente a la que la le ha gustado mucho "Mar adentro", también hay un montón a la que le ha parecido una película discretita o floja, y que le hayan dado 14 Goyas no va a ayudarle nada. Suele pasar que cuando se elogia mucho algo que te parece que no es para tanto, acabas pillándole tirria, como me pasa a mí con "Amélie", una película cuca que estoy empezando a odiar de lo que yo considero tanta sobrevaloración.

Y es una pena, porque para mi Amenábar es un director completamente necesario e imprescindible, que ha aportado una originalidad que se echaba mucho en falta. Todavía recuerdo lo mucho que me impactó "Tesis", desde el primer segundo de metraje, y lo grabada que se me quedó esa escena en la que Eduardo Noriega le está diciendo a Ana Torrent todo lo que le va a hacer y acaba con esa memorable frase: "Acojona, ¿eh?". Pone los pelos de punta.

"Abre los ojos" me decepcionó bastante la primera vez que la vi. La segunda y tercera vez me gustó más, pero sigue sin convencerme del todo porque no me la creo. Sí, ya sé que es una película de ciencia ficción, y que es un guión muy trabajado en el que todo encaja, pero... no sé, siempre tengo una sensación de que algo chirría, de que todo está un poco traído por los pelos. Y tal vez no son más que ganas de ponerse puntilloso, porque quizá no debería ser tan injusto con una película que me sorprende tantas veces durante su desarrollo, y que tiene un montón de giros maestros. Porque eso me encanta, ir al cine y que jueguen conmigo, que surjan cosas inesperadas, es algo que me hace disfrutar un montón. Y eso sí que lo hace muy bien Amenábar, como otros directores de su generación igual de polémicos y a los que también admiro mucho, como David Fincher ("Seven", "The game", "El club de la lucha") o M. Night Shyamalan ("El sexto sentido", "Señales", "El bosque").

Y "Los otros" me parece simplemente una obra maestra, y una muestra de que no hablamos de un pequeño director autóctono que hace cosas interesantes, sino de un señor con mucho talento que puede codearse con otros realizadores internacionales de mayor renombre.

Por eso, no sé que esperarme el 11 de febrero, cuando por fin se estrene en el Reino Unido "Mar adentro". Lo que sí está claro es que es una vuelta de tuerca a lo que ha hecho anteriormente, que va a suponer su consagración internacional (le den el Óscar o no), pero que también abre un gran interrogante: ¿por dónde va a tirar en su quinta película? ¿Volverá al terror y el suspense, o seguirá intentando profundizar en el drama? Chi lo sa.

(Continuará).